El 13 de diciembre de 2020, Joaquín lanzó su obra Yeyamá Akuará en el evento de los Boston Fashion Awards. Esta obra confronta la descremación racial y de género.
Bienvenido a la tercera edición de LOOK & FEEL MAGAZINE y con ella deseamos que conozcas a un artista colombiano maravilloso que me ha ofrecido su amistad y a quien he acogido como familia L&F.
Un hombre joven, amable, carismático y con un alma milenaria. Un apasionado que cuenta sus experiencias con tanta efusión y humildad, que evoca estar sentado leyendo una novela de míticas proporciones. ¡Un ESCULTOR de hermosas obras y de grandes historias!
JOAQUÍN RESTREPO, oriundo de Medellín y ciudadano del planeta, se define como un ser humano sencillo que busca ser mejor siempre y con vocación para sumarle a la vida de los demás. Cree fervorosamente que brillar depende de cada uno y, a su vez, de la consciencia colectiva que nos rodea.
De muy niño se sintió a gusto y en paz, en lugares con silencios acogedores, de místicos rincones y guardianes de historias antiguas. Su afinidad fue más fuerte con los adultos mayores y advierte que la sabiduría se encuentra en estas almas que han vivido una vida entera y que tienen el cariño para narrarte sus anécdotas con una tranquilidad y apertura totalmente admirables.
Fotografía Diego González Rocha
Fotografía Diego González Rocha
Fotografía Diego González Rocha
Fotografía Diego González Rocha
Fotografía Diego González Rocha
Para Joaquín, la palabra amor es sinónimo de caridad y antónimo de obsesión.
Darse al otro inteligentemente y ser humilde al recibir, siempre teniendo en cuenta que no todas las personas valoran el recibir amor.
Es por esto que Joaquín siempre ha buscado cumplir su apetito por inquirir cerebros maduros, aprender de los errores y entender el futuro. Todo, con el ánimo de dejar un legado lleno de amor y crear un mundo mejor, y de paso, evolucionar su alma constantemente.
Con su intrépida personalidad y por mera voluntad, llegó a las puertas de gigantes tales como la artista estadounidense con alma paisa, Ethel Gilmour, consejera y amiga. La perseverancia, brío y energía del pequeño Joaquín, hicieron que el Maestro David Manzur ya jubilado de la academia, lo tomara de la mano y los adoptara como su pupilo.
Actualmente y a sus 36 años, ya ha simpatizado con personajes icónicos del arte, celebridades y políticos legendarios de los cuales siempre registra historias extraordinarias. Sea cual sea la historia, la positividad de este joven en sus relatos, me hacen ver cuánto le han marcado todas estas experiencias con un gran sentido de aprendizaje, crecimiento y agradecimiento.
Con un juicio religioso, Joaquín posee un mecanismo de trabajo y una mirada del arte con características cuánticas. Nuestra charla confluye con entre ideas, pensamientos, experiencias, obsesiones y pasiones con raíces de innumerables procedencias y culturas.
Es admirable cuanta energía y consagración asume este hombre en su talento con la narrativa y empatía.
El artista de mente cuántica menciona a Carl Jung, padre de la Psicología Analítica, para sustentar cómo sus obras y estilo han tomado forma.
Fotografía Natalia Parrado
Plantea que, de las muchas posibilidades de una idea en el inconsciente, el consciente debe enfocarse en apreciar lo ya existente, para luego absorber y discernir información, y a partir de eso entrenar y crear algo en el presente. Eso significa que todos asumimos el legado de todos y así en adelante dejaremos nuestro legado alimentando la inconsciencia colectiva y universal.
En cuanto a sus obras, él declara que su pieza consentida es Miserere. El caballo en láminas de hierro de más de dos metros de alto el cual es una especie de retrato tanto personal como familiar.
La historia de esta escultura, es una muestra y ejemplo para ti, mi fiel lector L&F, que el éxito en la carrera del arte, arquitectura o diseño radica en enfocarse en el DESEO, meterle pasión a las cosas, construir recuerdos y esculpir constantemente la vida.
Muy sabiamente reconoce que, en el medio hay grandes dificultades en el proceso, ya que hay que desprenderse de personas o cosas, enfrentar situaciones difíciles y superar innumerables retos.
En sus palabras, te aconseja que, para emprender, el éxito radica en perseverar en el tiempo, equivocarse pronto y conservar una ingenuidad loca. Siempre cuidando del don de la vocación, sin desbocarse y perenemente humildes.
Con estas últimas palabras, me despido y te invito a que visites su página y te deleites con sus piezas y descargues su más reciente obra AMOR FATI, una serie de piezas que evocan un viaje personal e introspectivo del autor, toda una oda a su aceptación como individuo y una catarsis para lograr la libertad interna.
Amor Fati es la primera exhibición virtual del artista colombiano Joaquín Restrepo en donde pone en escena un grupo escultórico de imágenes en un escenario tridimensional. El trabajo de Restrepo es un proyecto ampliamente referenciado por una tradición de pensamiento sobre el cuerpo y la experiencia subjetiva del mismo.
Las piezas, que componen la exhibición, tienen en común una intención de gestualidad corporal y una construcción industrial parcial. Las esculturas dan forma a un cuerpo humano que revelan un profundo conocimiento de la anatomía humana, el volumen y el gesto.
Estas son realizadas con un proceso de fundición y ensamble que se encuentra en el diálogo entre los procesos de construcción de la ingeniería industrial del último siglo y el proceso de moldeado por adición propio de la tradición de la escultura por fundición.
La premisa Amor Fati como concepto es ética y no metafórica. Al vivir el presente sin la promesa y el peso del futuro se posibilita aferrarse a lo único que se tiene, una postura existencial que hace valorar el presente por encima de un futuro prometedor o aterrador.
Reconocer este principio es entender que la vida se nos va, que la vida termina, por lo que la idea de futuro no tiene mucho sentido. La invitación es a que el hombre, el hombre “fuerte”, se afianza reconociendo su vida y la presencia de la misma en su presente.